El veneno de abeja (o apitoxina) se ha ganado la fama de “botox natural” y de alivio frente a traumatismos gracias a su contendido en melitina, que aunque es el responsable de la picazón y dolor que produce la picadura, también contiene otros principios muy interesantes de los que podemos beneficiarnos.
La melitina es un potente antiinflamatorio que incluso consigue superar a algunos corticoides, ya que es capaz de estimular la fabricación natural de cortisona. El veneno de abeja (o apitoxina) también tiene grandes propiedades cosméticas ya que contiene apamina (una neurotoxina), adolapina (un analgéisco), hialuronidasa (un vasodilatador) y fosfolipasa (ayuda a inhibir la oxidación).
Existe un tratamiento con veneno de abeja que se denomina TVA, conocido también como apipuntura, utilizado para tratar determinadas dolencias y que consiste en utilizar abejas directamente en la zona afectada con el objeto de que realicen la picadura. Esta sería la forma más “directa” de recibir el veneno de abeja pero también es la más dolorosa.
Otras alternativas para la aplicación del veneno de abeja (o apitoxina) es la extracción del mismo y añadirlo posteriormente en forma de ingrediente activo a una crema. De esta forma se consigue el beneficio del veneno de abeja de una forma menos dolorosa, aunque en este caso, es necesario un poco más de tiempo para que produzca el mismo efecto.
A día de hoy se siguen estudiando las propiedades beneficiosas del veneno de abeja, ya que el descubrimiento de sus propiedades está provocando toda una revolución.
Beneficios
En cuanto a los beneficios cosméticos, se atribuye al veneno de abeja el ser la alternativa natural al botox, ya que según algunos estudios, contribuye a la producción de colágeno y a la reparación de las células dañadas, actuando también como barrera protectora contra los radicales libres.
El veneno de abeja (o apitoxina), aumenta la circulación sanguínea al hacerla más fluida, también dilata las arterias y los capilares ayudando a limpiar las impurezas existentes.
El veneno de abeja está indicado para la artritis reumatoide, psoriasis, dolor muscular y/o articular, bursitis, tendinitis, esquinces, artrosis, gota, dolor cervical, mala circulación, herpes… y en general todo problema originado por algún tipo de traumatismo.
Es recomendable potenciar la acción de la apitoxina con un suplemento de vitamina C, así como una alimentación basada en alimentos de origen vegetal.
Advertencias
No se aconseja la utilización del veneno de abeja (o apitoxina) en caso de ser alérgico a los productos generados por las abejas o picaduras de las mismas.