Envio gratis 40€
Envío gratis 40€*
Excelente 4.82/5.00
Excelente 4.82/5.00
Entrega 24h (L. a V)
Entrega 24h (L a V)

Pancreatitis: síntomas, causas, tratamiento y dieta. Guía

Índice de contenidos

  1. ¿Qué es la pancreatitis y cómo se diagnostica?
  2. Causas de la pancreatitis aguda o crónica
  3. Síntomas de la pancreatitis y evolución de la enfermedad
  4. Tratamiento para la pancreatitis y cómo prevenirla
  5. Productos naturales para el páncreas
    1. Antioxidantes
      1. Amalaki
      2. Extracto de semilla de uva
      3. Coenzima Q10
    2. Plantas e infusiones para el páncreas
      1. Zumo de aloe vera
      2. Té verde
      3. Raíz de diente de león
      4. Raíz de regaliz
      5. Rizoma de cúrcuma
      6. Fenogreco
      7. Sumidad florida de verbena
    1. Suplementos vitamínicos A, D, E, K y B12
    2. Omega 3
    3. Enzimas pancreáticas
    4. Triglicéridos de cadena media MCT
    5. Glutamina
  6. Dieta y alimentos para el páncreas
  7. Conclusión
  8. Referencias

¿Qué es la pancreatitis y cómo se diagnostica?

La pancreatitis, como el nombre indica, es una inflamación del páncreas. El páncreas es una glándula de gran tamaño ubicada detrás del estómago que segrega jugos digestivos en el intestino delgado a través de un tubo llamado conducto pancreático. También libera hormonas en sangre tan importantes como la insulina o el glucagón.

La pancreatitis puede ser aguda o crónica, y de cualquier forma, es grave y puede traer complicaciones, estas incluyen [6-7]:

  • Infección del páncreas
  • Quistes que pueden infectarse, sangrar o romperse
  • Fallo orgánico (corazón, riñón, pulmones) y shock debido a las toxinas en la sangre
  • Diabetes tipo II
  • Cáncer de páncreas

El diagnóstico de la pancreatitis suele ser claro en las fases avanzadas y difícil en estadios precoces. En la mayor parte de los casos la inflamación es leve, pero en 1 de cada 5 casos es grave. En los casos leves el pronóstico es bueno y la recuperación es completa. Sin embargo, los pacientes con cuadros graves tienen un riesgo de fallecer de hasta el 20%, generalmente personas con necrosis extensa del páncreas e insuficiencia de varios órganos o funciones 5

La pancreatitis crónica no tiene cura, generalmente empeora con el tiempo proporcionando un  daño permanente. 

Las pruebas y los procedimientos utilizados para diagnosticar la pancreatitis son 2:

  •  Ecografía endoscópica para detectar inflamación y bloqueos en el conducto pancreático o el conducto biliar. Se trata de la prueba más útil para valorar mejor el páncreas y detectar cálculos biliares no vistos con otras pruebas de imagen. 5 
  • Análisis de sangre para detectar niveles elevados de enzimas pancreáticas, (amilasa o lipasa), que casi siempre están elevadas en la pancreatitis aguda, junto con glóbulos blancos, función renal y enzimas hepáticas.
  • Ecografía abdominal para detectar cálculos biliares e inflamación del páncreas
  • Exploración por tomografía computarizada para detectar cálculos biliares y evaluar el grado de inflamación y necrosis del páncreas. Esta prueba es útil en casos donde las pancreatitis agudas cursan con niveles normales de enzimas pancreáticas 5.
  • Resonancia magnética para detectar anomalías en la vesícula, el páncreas y los conductos. Es una prueba útil cuando existe alergia al contraste intravenoso, si hay insuficiencia renal o si se quiere descartar la presencia de un cálculo en el colédoco 5.
  • Análisis de heces en casos de pancreatitis crónica para medir los niveles de grasa, que podrían indicar que el aparato digestivo no está absorbiendo los nutrientes de manera adecuada. 

Causas de la pancreatitis aguda o crónica

La pancreatitis aguda se desarrolla repentinamente y generalmente desaparece en pocos días con tratamiento, mientras que la pancreatitis crónica, aunque no tiene cura ni mejora, puede ser tratada con algunas alternativas que detallaremos a continuación, siempre y cuando sean supervisadas por un médico especialista 6 ; y, de cualquier forma, si el paciente sigue unos hábitos saludables y un tratamiento adecuado, la sintomatología de la progresión de la enfermedad es muy leve, pudiendo llevar un ritmo de vida completamente normal.  

Las dos causas más frecuentes que causan la pancreatitis (80%) son los cálculos en la vesícula biliar (colelitiasis) y el consumo excesivo de alcohol. Los cálculos de la vesícula producen pancreatitis al moverse hacia el conducto biliar y atascar la salida del páncreas hacia el intestino. El alcohol tiene un efecto tóxico directo y también puede producir pancreatitis crónica. 

Otras causas  pueden ser el aumento importante de los niveles de grasa en sangre (hipertrigliceridemia), aumento mantenido de calcio en sangre (hipercalcemia), obstrucciones de la salida del conducto del páncreas, golpes en el abdomen, algunas intervenciones quirúrgicas y la realización de una prueba llamada colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (CPRE) y algunos medicamentos (azatioprina, sulfonamidas, corticosteroides, medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) y antibióticos como la tetraciclina).

También los antecedentes familiares influyen en importante medida, como por ejemplo los antecedentes de fibrosis quística o de triglicéridos altos en sangre. A su vez, se debe tener en cuenta que su origen se puede encontrar en una infección vírica; ya sea por paperas, virus de la hepatitis, rubéola, virus de Epstein-Barr (la causa de la mononucleosis) o por citomegalovirus 6. En aproximadamente un 20% de los pacientes no se descubre la causa aunque de ese porcentaje sólo sufren nuevos episodios de pancreatitis un pequeño porcentaje (5%). 5

Curiosamente, su detección suele ser más frecuente en varones fumadores con edades comprendidas entre los 35 y los 64 años, y en cuanto al perfil étnico, los afroamericanos son más tendentes a desarrollar esta enfermedad con respecto a los caucásicos o nativos americanos. 6

Síntomas de la pancreatitis y evolución de la enfermedad

Se manifiesta casi siempre como un dolor de abdomen continuo e intenso, localizado principalmente en su parte superior aunque puede ocupar todo el vientre, con frecuencia irradiado a la espalda “en cinturón” y acompañado en la mayor parte de los casos de náuseas y vómitos 5. Los síntomas incluyen náuseas, vómitos, pérdida de peso y heces grasas y diabetes en grado variable 4.

Las pacientes con disfunción pancreática severa no pueden digerir adecuadamente los alimentos, lo que provoca malabsorción de nutrientes. Más del 30% de los pacientes  presentan esteatorrea (heces grasas), lo que suele indicar la destrucción irreversible del 90% de la glándula. Por lo tanto, un fallo en la capacidad digestiva ocasiona diarrea con heces voluminosas y grasientas y pérdida de peso. La malabsorción de vitaminas liposolubles no es infrecuente y, aunque rara vez ocasiona manifestaciones clínicas relevantes, se ha descrito un notable aumento de enfermedad metabólica ósea y de alteración en la visión nocturna en pacientes con pancreatitis crónica 4. Por otra parte, la alteración en el pH duodenal puede causar déficit de vitamina B12 por dificultades en la transferencia desde la proteína R al factor intrínseco. 4

Por otro lado,  en los casos más graves se produce una necrosis del tejido hepático. como hemos comentado anteriormente, la pancreatitis es uno de los principales factores de riesgo en el desarrollo de cáncer pancreático 7.

Tratamiento para la pancreatitis y cómo prevenirla

El tratamiento de una pancreatitis aguda suele proporcionar fluidos, analgésicos, y antibióticos en caso de infección por vía intravenosa a través de nutrición artificial durante unos días en el hospital. También se puede proceder al ayuno para permitir que el páncreas descanse y se estabilice 4. En los casos leves no suelen ser necesarios más tratamientos y en aproximadamente una semana el paciente se recupera totalmente 5. Después, una vez recibida el alta hospitalaria, es posible que durante un tiempo el paciente deba tomar enzimas pancreáticas y llevar una dieta especial, siendo importante evitar el tabaco y el alcohol 1.  Por otro lado, si el paciente presenta cálculos biliares, su médico puede recomendarle una cirugía u otros procedimientos para extirparlos 4. Lo más importante es tomar medidas para evitar que se repita, tratándose la causa siempre que sea posible. Se deben retirar ciertos medicamentos si el médico piensa que estos fueron la causa. La hipertrigliceridemia o la hipercalcemia tienen tratamientos específicos. Y, si no se conoce la causa, puede ser necesario para alcanzar el diagnóstico realizar otras pruebas, como una ecografía endoscópica, una resonancia magnética o una CPRE 6.

La pancreatitis crónica por su parte, al ser una inflamación progresiva del páncreas, tiene como objetivos prioritarios, el alivio del dolor, la corrección de la insuficiencia pancreática y el manejo de las complicaciones. Debe probarse inicialmente un tratamiento con AINES, aunque la mayoría de los pacientes con pancreatitis crónica en algún momento pueden precisar de analgésicos más potentes, generalmente opiáceos de liberación prolongada o transdérmicos 7. El control de la dispensación y el uso concomitante de moduladores como la gabapentina o los inhibidores de la recaptación de serotonina son importantes para evitar el abuso y la adicción 5. Con frecuencia, se debe  valorar remitir al paciente a una clínica especializada en el tratamiento del dolor 7. En ocasiones se precisa cirugía, en los casos en que la necrosis se infecta, con intención de limpiar lo más posible la zona del páncreas y sus alrededores (necrosectomía). La colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (CPRE) puede ser necesaria para extraer cálculos atascados en el conducto colédoco, y ciertos pseudoquistes también pueden precisar tratamiento, generalmente vaciándolos hacia el estómago o intestino por medio de cirugía o endoscopia 5.

Las personas con pancreatitis crónica pueden requerir tratamiento para la adicción al alcohol, si esa es la causa. El tratamiento también incluye manejo del dolor, suplementos de enzimas pancreáticas y cambios en la dieta. El tratamiento para los pacientes que tienen pancreatitis debido a niveles altos de triglicéridos incluye pérdida de peso, ejercicio, comer una dieta baja en grasas, controlar el azúcar en la sangre (si tiene diabetes) y evitar el alcohol y los medicamentos que pueden aumentar los triglicéridos, como los diuréticos tiazídicos y beta. -bloqueadores 6. En algunos casos, los médicos pueden recetar esteroides para tratar la pancreatitis autoinmune.

Sea la pancreatitis aguda o crónica, y especialmente importante en este último caso, se debe seguir una dieta baja en grasas, abstenerse de beber alcohol y evitar los traumatismos abdominales para prevenir ataques agudos y daños mayores. Es especialmente importante dejar de consumir alcohol.  Tanto los antecedentes de su consumo previo al diagnóstico, como la persistencia en el mismo durante el curso de la enfermedad acelera la progresión de la misma y se asocian de forma independiente con mayor severidad del dolor, más esteatorrea, mayor porcentaje de diabetes, incremento en el número de complicaciones y de mortalidad, incluso con ingestas de alcohol inferiores a 50 g/d 6 . La deshabituación del alcohol es un problema complejo, que suele requerir un abordaje multidisciplinar, en ocasiones con técnicas poco convencionales. Se considera que alrededor del 70% de los casos de pancreatitis son inducidos por el alcohol 6, y la mitad de los que tuvieron pancreatitis aguda inducida por el alcohol tendrán recaídas. 

Por otro lado, las personas con niveles altos de triglicéridos deben perder peso, hacer ejercicio y evitar medicamentos, como los diuréticos tiazídicos y los bloqueadores beta, que aumentan los niveles de triglicéridos. Dados los informes que sugieren que el estrés oxidativo puede contribuir al desarrollo de pancreatitis y que la suplementación con antioxidantes puede ser beneficiosa, los proveedores de atención médica pueden comenzar a recomendar antioxidantes a las personas con pancreatitis 6.

Cuando el síntoma es la esteatorrea, puede llevarse a cabo un tratamiento dietético con comidas de poco volumen, frecuentes y con bajo contenido en grasa (unos 25 g/d) pero su eficacia es variable 6. El tratamiento con antioxidantes, incluyendo vitamina C, metionina, selenio o alopurinol ha demostrado beneficios en un estudio con un número limitado de pacientes, pero los resultados no han podido reproducirse en otros 6. Sin embargo, un tratamiento dietético adecuado combinado con ciertas vitaminas, enzimas digestivas y algunas plantas en concreto que detallaremos a continuación, han demostrado ofrecer soluciones factibles para aliviar la sintomatología y ralentizar el progreso de la enfermedad. 

Productos naturales para el páncreas

Existen muchas alternativas a tener en cuenta para el tratamiento de la pancreatitis crónica. A continuación, detallamos cuáles son los que cuentan con mayor respaldo por parte de la comunidad científica:

Antioxidantes

Los antioxidantes son necesarios para prevenir el daño pancreático y mejorar su función, reduciendo la inflamación o el dolor. También hay evidencias que apuntan a que los suplementos antioxidantes pueden eliminar o minimizar el estrés oxidativo y ayudar a aliviar el dolor de la pancreatitis crónica 6..

Una de las vitaminas antioxidantes a tener especialmente en cuenta es la vitamina C. Buenas fuentes de vitamina C son aportadas por alimentos como el amalaki (amla), y bayas como las frambuesas o los arándanos, los cuales además aportan buena cantidad de antioxidantes, de gran interés en este caso para prevenir el daño pancreático y hepático. Además, en la práctica clínica, como se ha mencionado anteriormente, el consumo de vitamina C forma parte del tratamiento de forma habitual, en proporciones que rondan el gramo diario, pudiendo reducir esta cantidad en casos de diarrea 6

Ejemplo de ello es la excelente combinación que aportan los suplementos de vitamina C y arándano rojo, como este de Solgar. 

Se sabe que la terapia combinada con selenio, betacaroteno, metionina y vitaminas C y E mejora los síntomas de la pancreatitis crónica y recurrente 21. Esto, sin embargo, requiere que se tomen muchas pastillas diariamente, lo que no es práctico y puede reducir la adherencia al tratamiento. Por ello, te mostramos diferentes alternativas eficaces a continuación.

Amalaki 

El amalaki (Grosella Espinosa India) es un poderoso antioxidante y una de las fuentes naturales más ricas de vitamina C. Los estudios in vitro sugieren que podría inducir la apoptosis en células cancerosas del páncreas 19.

La grosella espinosa india puede aumentar el riesgo de sangrado, especialmente entre las personas que toman medicamentos anticoagulantes 6. Es necesario consultar su posible consumo con el médico de especialista.

Extracto de semilla de uva (Vitis vinifera)

El extracto de piel y semilla de uva ha señalado en estudios animales que puede reducir la lipotoxicidad del páncreas, el estrés oxidativo y la inflamación en ratas alimentadas con una dieta rica en grasas 20.

Por otro lado,  se ha observado que un extracto de proantocianidina de semilla de uva IH636 (conocido comercialmente como ActiVin) proporciona una reducción en la frecuencia e intensidad del dolor abdominal, así como una posible resolución de los vómitos 21

Se debe tener en cuenta que el extracto de semilla de uva puede tener un efecto anticoagulante y puede aumentar el efecto de los medicamentos anticoagulantes, como la warfarina (Coumadin) y la aspirina, así como otras interacciones farmacológicas 6. Es necesario consultar su posible consumo con el médico de especialista.

Coenzima Q10

De nuevo, investigaciones muy recientes realizadas en ratones han concluido que la coenzima Q10 podría atenuar el daño pancreático y sus complicaciones pulmonares asociadas a través de la inhibición de las citoquinas inflamatorias, contribuyendo a la atenuación de la pancreatitis aguda 22.

Se recomienda consumir cantidades de coenzima Q10 (CoQ10), que van de los 100 a los 200 mg, antes de acostarse. Pero se debe tener en cuenta especialmente la supervisión médica con este tratamiento ya que la CoQ10 podría ayudar a la coagulación de la sangre, disminuyendo la eficacia de la warfarina (Coumadin) en pacientes que la consuman 6.

Plantas e Infusiones para el páncreas

A la hora de usar plantas para tratar la pancreatitis, conviene tener en cuenta que éstas nunca deben usarse como tratamiento único, ya que suelen resultar útiles junto con el tratamiento médico convencional. Mantener al médico informado sobre el uso de cualquier terapia complementaria o hierba es fundamental, para asegurar la máxima eficacia del tratamiento así como para evitar interacciones con medicamentos que se puedan estar tomando. Dentro del mundo de las plantas medicinales, podemos encontrar diferentes formatos, como extractos estandarizados (perlas, cápsulas o comprimidos), infusiones o tinturas.

Zumo de Aloe vera (Aloe barbadensis)

El jugo de aloe vera ha demostrado en estudios animales que potencialmente protege las células pancreáticas en el desarrollo de la diabetes 8. Este es un dato importante a tener en cuenta cuando los pacientes con pancreatitis cursan una complicación de la enfermedad desarrollando un fallo en las células productoras de insulina, provocando por tanto una diabetes. 

Té verde (Camellia sinensis)

De nuevo, estudios en animales han señalado que los polifenoles del té verde pueden mejorar la lesión pancreática en la pancreatitis aguda 9. Sin embargo, en el último metaanálisis publicado respecto a la relación del cáncer de páncreas y el consumo de té verde, no se ha encontrado una correlación entre ambos 10.

Se desaconseja el consumo de té verde en forma de extracto, ya que algunas investigaciones apuntan a que dicha concentración puede ocasionar una pancreatitis aguda 17.

Raíz de diente de león (Taraxacum campylode)

El diente de león puede aliviar algunos síntomas relacionados con la inflamación que se produce en las enfermedades gastrointestinales, gracias a sus abundantes sustancias activas antiinflamatorias y antioxidantes, de acuerdo a una reciente revisión publicada en la prestigiosa revista científica 11.  También en ésta se señala que podría ser una alternativa anticancerígena no tóxica y eficaz, debido a sus abundantes terpenoides y polisacáridos. En este sentido, se han observado resultados muy positivos en estudios in vitro a través de la inducción selectiva de apoptosis y autofagia mediante tratamiento con extracto de raíz de diente de león en células cancerígenas de páncreas humano 12.

Raíz de regaliz (Glycyrrhiza glabra)

La glicirrina, el principal principio activo de interés terapéutico que ofrece el regaliz, atenúa la lesión tisular y reduce la acumulación de neutrófilos (tipo de glóbulo blanco), en la pancreatitis aguda experimental, según estudios in vitro. 13

Además, el extracto de regaliz, ofrece buenas concentraciones de cinco flavonoides y tres triterpenoides en concreto que poseen grandes actividades antidiabéticas in vivo e in vitro 18

Rizoma de cúrcuma (Curcuma longa)

Investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) 14 han identificado un uso novedoso para este compuesto en el tratamiento de la pancreatitis. En un modelo de pancreatitis en ratas, la curcumina disminuyó el nivel de varios marcadores que se usan típicamente para diagnosticar la enfermedad, incluidas las concentraciones séricas de lipasa y amilasa, la acumulación de neutrófilos y la activación de la tripsina. También se probaron derivados sintéticos de curcumina, algunos de los cuales resultaron ser incluso más potentes que la propia curcumina. Investigaciones posteriores en dicha universidad han concluido que la curcumina atenúa la expresión de varias citoquinas proinflamatorias, incluidas TNF-a, IL-6 e IL-8. Dado que esta vía inflamatoria está involucrada en otras enfermedades, es posible que la curcumina pueda tener múltiples usos terapéuticos dado que ha demostrado ser un gran antiinflamatorio a varios niveles.

Fenogreco (Trigonella foenum-graecum)

El extracto etanólico de semillas de fenogreco modera el daño pancreático inducido en ratas macho, según las últimas investigaciones 15. Esta planta rica en flavonoides, alcaloides y mucílagos, es también un remedio natural eficaz en casos de úlcera gástrica y gastritis, donde se utiliza para proteger la mucosa estomacal.

Sumidad florida de Verbena (Verbena officinalis)

Por su parte, la verbena, una planta con múltiples beneficios y especialmente conocida por sus propiedades depurativas y sedantes,  ha mostrado en estudios preclínicos una actividad antiinflamatoria notoria en marcadores  inflamatorios de células renales y pancreáticas dañadas 16.

Suplementos vitamínicos (A,D,E,K y B12)

En numerosas ocasiones la pancreatitis conlleva una mala absorción de vitaminas liposolubles (A,D, E, K) y de la vitamina B12, relacionada con el factor intrínseco que se ve alterado frecuentemente en casos de pancreatitis. Se ha observado una mala absorción de vitamina B12 en alrededor del 30% de los pacientes adultos con insuficiencia pancreática exocrina 23.

Sin embargo, la deficiencia de vitaminas A y E  es la más frecuente, por tanto, es habitual que se incluya una suplementación de todas estas vitaminas en el tratamiento a seguir 24. Debe ser tenida en cuenta en la esteatorrea refractaria y sus niveles deben ser monitorizados en pacientes en los que no se consigue recuperación del peso 4. El uso de calcifediol (25-OH-vit D), más polar que los preparados de vitamina D estándar, es preferible en pacientes con malabsorción grasa 4. Habrá que prestar especial atención a la suplementación vitamínica por vía parenteral en los pacientes con historia de abuso crónico de alcohol, y a la aparición de síndrome de realimentación en pacientes con desnutrición severa.

Omega 3

Los ácidos grasos omega-3 pueden mejorar la respuesta proinflamatoria que se produce en la pancreatitis aguda grave al reducir la concentración de proteína C reactiva, pudiendo mejorar el resultado clínico 25. Con la ayuda de estos complementos alimenticios se puede obtener este beneficio:

Los ácidos grasos omega-3 pueden tener un efecto anticoagulante y pueden aumentar el efecto de los medicamentos anticoagulantes, como la warfarina (Coumadin) y la aspirina 6. Consulte con su médico para valorar la toma de este suplemento.

Enzimas pancreáticas

Una suplementación de enzimas pancreáticas está indicada cuando se ha perdido la funcionalidad de las mismas en las células pancreáticas, y por tanto, existe una deficiencia. Es muy importante que esta recomendación sea prescrita por el médico especialista, ya que no en todos los casos está indicado, incluso en algunos podría estar contraindicado. 

Además de su efecto directo sobre los alimentos, el uso de enzimas pancreáticas permite regular la liberación duodenal de colecistoquinina (CCK), hormona que estimula la secreción de enzimas digestivos pancreáticas.  Al favorecer la proteólisis de sus factores de liberación en el duodeno, permite el reposo pancreático y puede reducir el dolor asociado a la estimulación pancreática 4. Algunos ensayos clínicos controlados que estudian el uso de enzimas pancreáticas, han presentado resultados variables que pueden ser debidos al uso de diferentes preparados de enzimas pancreáticos (de liberación retarda, con recubrimiento entérico o sin él, etc.) que alcanzan concentraciones duodenales muy variables y al planteamiento de”end-points” dispares 4.

El tratamiento inicial puede hacerse con formulaciones conteniendo dosis altas de enzimas (16.000 UI de lipasa, 30.000 UI de proteasa y 30.000 UI de amilasa) sin recubrimiento entérico. Existen varios preparados con formulaciones distintas, en ocasiones expresadas en unidades de medidas diferentes (una UI equivale a 2-3 USP), que aseguren, al menos, 30.000 UI de lipasa con cada toma de alimento. Sin embargo, existen formulaciones microencapsuladas con mayor contenido en lipasa, pero pueden ser menos eficaces en casos con alteraciones en el vaciamiento gástrico 4.

El objetivo se dirige a intentar controlar los síntomas (esteatorrea, dolor), con cantidades de lipasa que se acercan al 10% de la producción pancreática normal, más que a conseguir la normalización de la digestión de grasas. La dosis dependerá del grado de déficit pancreático y de las características de la comida consumida (10-30 caps/d). Debe añadirse siempre al tratamiento un anti H2 o un inhibidor de la bomba de protones para evitar la degradación gástrica de las enzimas 4 .

Sura Vitasan ofrece un producto muy interesante a base de un concentrado de enzimas pancreáticas de origen porcino. Contiene una actividad estandarizada de lipasa, proteasa y amilasa de 325 mg por cápsula equivalentes a 1.300mg de pancreatina. 

Triglicéridos de cadena media (MCT)

Los MCT son muy interesantes para pacientes con dificultad para ganar peso, y que tienen problemas con la aliemntación aún consumiendo enzimas pancreáticas 4, ya que pueden aportar calorías adicionales. Su ventaja reside en que se absorben directamente por la mucosa intestinal, a diferencia de los triglicéridos de cadena larga, que requieren sales biliares y lipasa. Los MCT estimulan la secreción pancreática en menor proporción, y son transportados como los ácidos grasos libres hacia el hígado por la vena porta, por lo que una dieta pobre en grasa a la que se le añada un suplemento de MCT, reduce las complicaciones que puede sufrir el páncreas a la hora de metabolizar las grasas. Los MCT se comercializan en diferentes formatos, con dosis iniciales de 30-40 ml al día en adultos, repartidas en tres o cuatro tomas. Pueden aparecer algunos molestos efectos secundarios, como náuseas y vómitos esporádicos, molestias en el abdomen y diarrea.

El aceite MCT puede mezclarse con zumo y otras bebidas, y añadirlo a diferentes alimentos como sopas, guisos y ensaladas, siempre que al cocinar no se sobrepase la temperatura de 160º. No están recomendados en casos de cirrosis avanzadas. Asimismo, la suplementación con fórmulas enterales enriquecidas en MCT y péptidos parcialmente hidrolizados da buenos resultados, tal y como se recoge en un estudio piloto con 8 pacientes con PC y dolor postprandial, los cuales al cabo de 10 semanas de administración de estos suplementos, mejoraron sus síntomas.

Glutamina

El último metaanálisis publicado al respecto demuestra una clara ventaja de la suplementación con glutamina en pacientes con pancreatitis aguda que reciben nutrición parenteral total (administración de los nutrientes a través de una vena). Sin embargo, también se ha observado que los pacientes con pancreatitis aguda que reciben nutrición enteral no requieren suplementos de la misma 27

Dieta y alimentos para el páncreas

Durante el tratamiento de la pancreatitis, el médico podría indicarle al paciente que no coma ni beba por un tiempo, proporcionándole nutrición parenteral. Una vez el paciente pueda comenzar a comer de nuevo, el médico le recetará un plan de alimentación saludable y bajo en grasa que incluya comidas pequeñas y frecuentes 1. Si tiene pancreatitis, el paciente debe tomar mucho líquido (una buena vía son las infusiones) y limitar la cafeína. De igual forma, los profesionales de atención médica recomiendan encarecidamente a las personas con pancreatitis que no tomen alcohol ni fumen, incluso si la pancreatitis es leve 1

El paciente puede reducir su probabilidad de desarrollar pancreatitis si se ciñe a un plan de alimentación  que evite altas concentraciones de lípidos en sangre. Esto implica una alimentación baja en azúcares con alimentos de baja carga glucémica 28 , evitando los alimentos refinados como la pasta y el pan blanco, y los alimentos procesados en la mayor medida posible. 

Por otro lado, es muy conveniente seguir una alimentación rica en antioxidantes.  Como ya hemos visto anteriormente, existen estudios que han explorado el papel de los antioxidantes para ayudar al cuerpo a eliminar las células dañinas llamadas radicales libres. Los bajos niveles de antioxidantes en la sangre (incluidas las cantidades reducidas de vitaminas A, C y E, selenio y carotenoides) pueden provocar pancreatitis crónica debido a los efectos destructivos del aumento de los radicales libres 6. La pancreatitis inducida por el alcohol también está relacionada con niveles bajos de antioxidantes. Por tanto, la evidencia sugiere que aumentar la ingesta de antioxidantes (que se encuentran en frutas y vegetales de color verde y en las bayas) puede ayudar a proteger contra la pancreatitis o aliviar los síntomas de la afección. 

Es posible que su  médico quiera hacerle una prueba de alergias alimentarias. En ese caso tendrá que ser considerada la retirada de posibles alérgenos (gluten, productos lácteos, soja, aditivos alimentarios, etc). 6

También podría estar indicado el consumo de alimentos ricos en la cepa probiótica  Lactobacillus acidophilus, o recomendar su suplementación, cuya cantidad puede oscilar entre los 5 a los 10 mil millones de CFU (unidades formadoras de colonias) al día, para el mantenimiento de la salud gastrointestinal e inmunológica 6, aunque una vez más, esto deberá ser supervisado por el médico, por no comprometer al sistema inmunitario. 

Por último, y no menos importante, la realización de ejercicio moderado durante 30 minutos al día, 5 días a la semana, es lo idóneo para sobrellevar en óptimas condiciones el transcurso de la enfermedad 6.

¿Se cura la pancreatitis?

Como hemos mencionado anteriormente, la pancreatitis aguda se solventa al cabo de los días, mientras que la crónica no tiene cura y es progresiva con el paso del tiempo. En estos casos, seguir las recomendaciones de su médico, y llevar un estilo de vida saludable, con especial hincapié en la dieta adecuada y el no consumo de alcohol, tabaco y otros tóxicos, será fundamental para sobrellevar los síntomas. 

Conclusión

La pancreatitis es una enfermedad que cursa con la inflamación de los tejidos del páncreas. Ésta puede ser aguda o crónica. La pancreatitis aguda se puede solventar tras varios días de tratamiento hospitalario, mientras que la pancreatitis crónica es progresiva y no tiene cura.

Sin embargo, en este artículo hacemos una síntesis de las mejores alternativas naturales que han mostrado ser eficaces para ralentizar el progreso de la enfermedad proporcionando al paciente la mayor calidad de vida posible. 

Referencias

1. NIH. Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales. Pancreatitis. Biblioteca Nacional de Medicina de los EEUU. Medline Plus (online).

2. Mayo Clinic. Diagnósticos y tratamientos. Pancreatitis (online).

3. Vlodov J et al. Acute and chronic pancreatitis. Gastroenterology. Volume 28. Number 3. Septemeber 2001.

4. Botella Romero F, y Alfaro Martínez JJ. Repercusiones nutricionales y manejo de la pancreatitis crónica. Nutr. Hosp. Vol.23 supl.2 Madrid may. 2008

5. Moreira VF, López San Román A. Pancreatitis aguda. Rev. esp. enferm. Dig. vol.102 no.9 Madrid sep. 2010

6. St. Luke’s Hospital. Complementary and Alternative Medicine. Pancreatitis (online).

7. Yamaguchi K. How to Define Patients at High Risk for Pancreatic Cancer. Pancreatology 2011;11(suppl 2):3–6.

8. Salem MY et al. The possible protective role of aloe vera extracts in pancreatic β cells of experimentally induced diabetic rats. A histological and immunohistochemical study. The Egyptian Journal of Histology: September 2014 – Volume 37 – Issue 3 – p 571-578.

9. Babu BI et al. Green tea polyphenols ameliorate pancreatic injury in cerulein-induced murine acute pancreatitis. Pancreas. 2009 Nov;38(8):954-67.

10. Long Zeng J et al. Green Tea Consumption and Risk of Pancreatic Cancer: A Meta-analysis. Nutrients. 2014 Nov; 6(11): 4640–4650.

11. Li Y et al. The potential of dandelion in the fight against gastrointestinal diseases: A review. J Ethnopharmacol. 2022 Apr 8;115272.

12. Ovadje P et al. Selective induction of apoptosis and autophagy through treatment with dandelion root extract in human pancreatic cancer cells. Pancreas. 2012 Oct;41(7):1039-47.

13. Fakhari S et al. Glycyrrhizin attenuates tissue injury and reduces neutrophil accumulation in experimental acute pancreatitis. Int J Clin Exp Pathol. 2014; 7(1): 101–109.

14. UCLA. Technology Development Group. Curcumin as a Treatment for Pancreatitis. 2006.

15. Mesallam DIA et al. Ethanolic extract of fenugreek seeds moderates dimethoate-induced pancreatic damage in male rats. Environ Sci Pollut Res Int. 2018 Feb;25(4):3894-3904.

16. De Lima R et al. Anti-inflammatory activity and identification of the Verbena litoralis Kunth crude extract constituents. Braz. J. Pharm. Sci. 2020;56:e17419. 

17. Hammad M et al. Can Green Tea Extract Become a Cause of Acute Pancreatitis?. Planta Med 2009; 75 – P-94.

18. Yang L et al. The anti-diabetic activity of licorice, a widely used Chinese herb. J Ethnopharmacol. 2020 Dec 5;263:113216.

19. Shi Y et al. Amla, an Ayuervedic herb induces apoptosis in pancreatic cancer cells by activating extracellular signal-regulated kinase. Cancer Res (2008) 68 (9_Supplement): 5471.

20. Aloui F et al. Grape seed and skin extract reduces pancreas lipotoxicity, oxidative stress and inflammation in high fat diet fed rats. Biomed Pharmacother. 2016 Dec;84:2020-2028. 

21. Banerjee B, Bagchi D.  Beneficial effects of a novel IH636 grape seed proanthocyanidin extract in the treatment of chronic pancreatitis. Digestion. 2001;63(3):203-6. 

 22. Yeon Shin J et al. Protective effects of Coenzyme Q10 against acute pancreatitis. Int Immunopharmacol. 2020 Nov;88:106900. 

23. Guéant JL et al. Malabsorption of vitamin B12 in pancreatic insufficiency of the adult and of the child. Pancreas. 1990 Sep;5(5):559-67.

24. Martínez- Moneo E et al. Deficiency of fat-soluble vitamins in chronic pancreatitis: A systematic review and meta-analysis. Pancreatology. Nov-Dec 2016;16(6):988-994.

25. Al-Leswas D et al. Intravenous omega-3 fatty acids are associated with better clinical outcome and less inflammation in patients with predicted severe acute pancreatitis: A randomised double blind controlled trial. Clinical Nutrition. Volume 39, Issue 9, P2711-2719, September 2020. 

26. Shea JC et al. An enteral therapy containing medium-chain triglycerides and hydrolyzed peptides reduces postprandial pain associated with chronic pancreatitis. Pancreatology. 2003;3(1):36-40.

27. Asrani V et al. Glutamine supplementation in acute pancreatitis: a meta-analysis of randomized controlled trials. Pancreatology. Sep-Oct 2013;13(5):468-74.

28. Shemesh E, Zafrir B. Hypertriglyceridemia-Related Pancreatitis In Patients With Type 2 Diabetes: Links And Risks. Diabetes Metab Syndr Obes. 2019; 12: 2041–2052. 

Belén Miralles
Belén Miralles es graduada en Nutrición Humana y Dietética por la Universidad CEU San Pablo, con estudios superiores de máster en Fitoterapia por la Universidad de Barcelona. Ha desarrollado su carrera profesional tanto en el ámbito de la nutrición clínica a través de la consulta de pacientes, como en el ámbito industrial y comercial en laboratorios de complementos alimenticios. Ha participado de forma activa en publicaciones científicas y como ponente en diferentes congresos. Belén colabora con El Búho Verde en la redacción de nuestros contenidos, y actualmente también colabora con otras publicaciones en varias revistas de salud.